Introducción a las tarjetas de débito
Las tarjetas de débito son emitidas por los respectivos bancos para facilitar las transacciones electrónicas. Una tarjeta de débito se puede deslizar con un PIN, o se puede mostrar en los lectores de tarjetas habilitados para Wi-Fi en el pago. Una tarjeta de débito recoge el dinero de la cuenta de ahorro que se mantiene en el banco, «cargando» el importe y reduciendo los ahorros. También se pueden utilizar para retirar dinero de los cajeros automáticos.
Comprensión de las tarjetas de débito
- Las tarjetas de débito suelen emitirse en el momento en que se activa la cuenta. Están hechas de plástico con información esencial grabada en la tarjeta, como la fecha de caducidad, el nombre y el número de la tarjeta, mientras que en el reverso contiene otros detalles de verificación cuando se solicita.
- Las tarjetas de débito funcionan como una solución intermedia entre las tarjetas de crédito y las tarjetas de cajeros automáticos, en las que se puede utilizar una tarjeta de débito para retirar dinero con un límite en el cajero automático afiliado, o utilizarla para cumplir con los pagos de las compras. Existe un límite de gasto en un día con la tarjeta de débito. La mayoría de las tarjetas de crédito requieren un PIN, aunque muchas otras no lo requieren y basta con pasarlas por debajo de un lector de tarjetas para realizar el pago.
- Por regla general, no puede gastar más que el saldo de su cuenta de ahorros en el banco afiliado a la tarjeta. Algunas cuentas permiten la opción de saldo cero en su cuenta, aunque gastar más del saldo restante puede estar sujeto a cargos. Pasar el dedo por un cajero automático no afiliado también puede suponer un pequeño cargo, al igual que perder, sustituir o regenerar una nueva tarjeta para cualquier propósito válido.
Aspectos destacados de las tarjetas de débito
- Las tarjetas de débito no te endeudan. La palabra «débito» en el contexto de la banca personal se refiere a «retirar» o «restar» de su cuenta. Las tarjetas de crédito significan que se pide prestado a un banco, y las tarjetas de crédito requieren que se pague un interés por la cantidad prestada.
- Las tarjetas de débito son más seguras que las de crédito en el sentido de que son menos arriesgadas que hacer compras a crédito.
- Por el contrario, las tarjetas de débito no ofrecen tantas ofertas como las de crédito.