Introducción
La reestructuración de la deuda corporativa se refiere al reajuste de una entidad empresarial que se encuentra en dificultades fiscales debido a sus compromisos y obligaciones pendientes y para infundir liquidez en las operaciones comerciales para mantenerla a flote. Este proceso lo llevan a cabo generalmente los acreedores y la dirección de la empresa, que se encuentra en dificultades.
Los acreedores de las empresas son, por lo general, bancos y empresas financieras no bancarias (NBFC). La reestructuración de la deuda de las empresas se realiza reduciendo el importe a pagar por la deuda. Además, el tipo de interés se reduce. Sin embargo, el plazo de amortización es mayor, lo que ayudará a la empresa a pagar las cuotas pendientes.
A veces, los acreedores renuncian a una parte de la deuda de la empresa. Pero, eso sería a cambio de acciones de la empresa. Sin embargo, este tipo de acuerdo es más favorable para la empresa en apuros que declararse en quiebra y someterse a tediosos procedimientos.
Desglose de la reestructuración de la deuda de las empresas
La necesidad de que una empresa se someta a una reestructuración de la deuda corporativa suele surgir cuando una empresa atraviesa dificultades fiscales y le resulta difícil cumplir con sus obligaciones y compromisos fiscales, como el reembolso de un préstamo.
En palabras sencillas, una empresa que se endeuda más que sus ingresos potenciales. Si las empresas ven que van a pasar por dificultades que pueden llevarlas a la quiebra, pueden iniciar una negociación con sus prestamistas y acreedores y disminuir su carga y, así, evitar las posibilidades de quiebra.
Quiebra vs. Reestructuración de la deuda de las empresas
La reestructuración de la deuda de las empresas es preferible a la quiebra. Esto se debe a que el procedimiento de quiebra puede ser costoso y a la mayoría de las pequeñas empresas les resulta difícil pasar por el proceso y, por lo tanto, prefieren ceder parte de las participaciones en la empresa a sus prestamistas en forma de acciones mediante la reestructuración de la deuda corporativa.