Introducción
Una recomendación general es la insistencia de un asesor financiero o de una organización a sus clientes para que vendan o compren un determinado activo o producto, independientemente de la compatibilidad del producto con sus necesidades de inversión y su perfil de riesgo.
Cómo entender la recomendación general
Generalmente, las recomendaciones generales pueden dar consejos sobre la compra o venta de una determinada acción o cualquier otra clase de activo. El objetivo puede ser alertar a los clientes del posible movimiento de la acción o de cualquier otro valor en cualquier dirección que el asesor financiero o la empresa crea que puede ocurrir.
Si el movimiento previsto es al alza, se insistirá a los clientes para que compren esa acción o activo a fin de aprovechar la probable escalada del precio. Asimismo, si el movimiento esperado es a la baja, se aconseja a los clientes que vendan esa participación para evitar pérdidas por la caída del precio.
Inconvenientes
Algunos ven negativamente las comunicaciones de recomendaciones en blanco, ya que la base de destinatarios contaría con personas de diferentes ámbitos de inversión, y todos ellos seguirían recibiendo la misma recomendación del asesor financiero.
Por ejemplo, un pensionista que generalmente tiene una menor tolerancia al riesgo y un trabajador joven con un mayor apetito de riesgo estarían recibiendo la misma recomendación general de su asesor financiero para invertir en una determinada acción, ya que tiene el potencial de proporcionar aparentemente altos rendimientos.
El joven trabajador estará en mejor posición para asumir el riesgo e invertir en la acción recomendada, ya que aún tiene mucho tiempo para recuperarse de las pérdidas si la acción no tiene el rendimiento esperado. Sin embargo, el pensionista, que invertirá los ahorros de su vida, no estará en condiciones de soportar las pérdidas que puedan derivarse de los distintos factores.