Introducción al liderazgo autocrático
El liderazgo autocrático está encabezado por un autócrata, un líder principal, que dirige el grupo, toma decisiones y planifica para que el resto de la gente lo siga. Las decisiones que se toman se basan únicamente en la conciencia y la habilidad del autócrata, con poca o ninguna aportación de los demás implicados o afectados en el proceso de formulación. Se trata de un estilo de dirección muy centrado en el objetivo.
Entender el liderazgo autocrático
Aunque esta forma de dirección suele ser menos favorable, ya que no tiene en cuenta las opiniones y aportaciones de los subordinados que deben trabajar para alcanzar los objetivos fijados por el líder. Sin embargo, en un sentido suelto, un poco más sano, el poder autocrático también se refiere a una persona que posee la autoridad y la responsabilidad del equipo, que será quien tome la decisión final, pero no sin haber consultado opiniones, inteligencia y necesidades externas.
Aun así, el liderazgo autocrático rara vez es gratificante. El peso de la responsabilidad recae en una sola persona, y el peso de la misma, aunque lo lleve el líder, lo cosecharán los subordinados. Esta forma de liderazgo ha sido una cosa del pasado durante mucho tiempo, y por buenas razones – la gente confiaba en sus líderes, y se dio que el líder se esforzará por traer el bienestar a la gente bajo el cuidado del líder.
En el mundo moderno, aunque no se suele aconsejar, los beneficios de un autócrata se utilizan en algunos lugares. El liderazgo autocrático puede verse en espacios que requieren una rápida toma de decisiones, donde la exigencia de los subordinados de contribuir intelectualmente es mínima. Ejemplos de este tipo de espacios son las unidades de fabricación, que están dirigidas por supervisores, que dan la última palabra sobre cualquier discrepancia o decisión en la unidad.
Aspectos destacados del liderazgo autocrático
- El liderazgo autocrático deriva de las palabras auto (que en griego significa ‘yo’) y crático, que implica ‘regla’.
- Este tipo de liderazgo puede ser esencial cuando la toma de decisiones debe ser rápida, cuando el líder tiene más conocimientos que el resto de los subordinados -a los que puede elegir para formar-, en la gestión de catástrofes -cuando todos están de acuerdo con el líder-, etc.
- Al no depender de muchas cabezas y manos, la rápida toma de decisiones por parte del autócrata actúa mejor ante las crisis y los cambios constantes.