En este artículo, hablaremos en detalle del impacto del GST en los mayoristas y minoristas.
La industria se prepara para la implantación del GST
El proyecto de ley del impuesto sobre bienes y servicios ha llegado a su fase final de aplicación y ya ha sido aprobado por la Lok Sabha. El gobierno ha recibido solicitudes específicas de la industria para abordar algunos de los problemas, ya que les resulta difícil hacer frente a los cambios propuestos en el nuevo régimen de impuestos indirectos.
Algunos organismos comerciales también están presionando para que se retrase la implantación del GST, ya que las pequeñas y medianas empresas (PYMES) aún no han adoptado los cambios necesarios para una transición sin problemas. Si bien esta transición no supondrá un gran reto para los fabricantes, ya que están fuertemente regulados por la ley de impuestos especiales, los mayoristas y minoristas en el país pueden enfrentarse a algunos problemas.
Mayoristas y minoristas fuera del tramo fiscal
Con el actual régimen de impuestos indirectos, los mayoristas y minoristas suelen eludir la responsabilidad fiscal, ya que no existe ningún mecanismo que permita rastrear sus compras y ventas reales. La mayoría de sus transacciones se realizan en negro, lo que significa que no se emite ninguna factura al comprador y, en última instancia, no se registra ninguna entrada en los libros de dichas ventas.
Estos contribuyentes suelen aprovechar la cuota tributaria evadida y rebajar el mercado para ganar en volumen. Su margen de beneficio sigue siendo tan bajo como el 1%. Dado que bajo el régimen del GST, cada factura relativa al suministro imponible tiene que ser cargada en el portal común del GSTN y tiene que ser aceptada por el comprador, los mayoristas y minoristas ahora no podrán escapar de su responsabilidad fiscal. La única posibilidad de evasión fiscal surgiría si toda la cadena de suministro está fuera de la red de impuestos y no presentó una declaración bajo la ley GST, lo cual es muy poco probable.
Impacto durante la desmonetización
Durante la desmonetización, los mayoristas y minoristas entraron en pánico. Muchos mayoristas, distribuidores y minoristas han tenido que desabastecerse de existencias y reducir el volumen de mercancías.Este desabastecimiento se debió en gran medida a la fuerte caída de la demanda de los consumidores. Las ventas de algunas de las empresas de bienes de consumo en el tercer trimestre del año fiscal 17 cayeron más del 44% en comparación con el tercer trimestre del año fiscal 16, según los datos del informe de Care Ratings del 15 de marzo de 2017.
Muchas de estas empresas de bienes de consumo se han lamentado de que, si bien la caída de la demanda de los consumidores ha sido limitada, las ventas se han visto gravemente afectadas debido a la escasa disponibilidad de existencias de los minoristas.
Impacto antes de la implantación
Es posible que asistamos a una actividad de desabastecimiento similar durante la fase de transición. Esto se debe principalmente a la facilidad de obtener créditos fiscales. Los mayoristas y minoristas actualmente registrados bajo la ley estatal del IVA habrían pagado el IVA sobre todas las existencias que tenían en la fecha de expiración del régimen fiscal actual.
Aunque en el proyecto de ley del GST se han incorporado disposiciones en las que el IVA pagado bajo el régimen actual se permitirá como crédito de entrada en el régimen del GST, el gobierno ha impuesto ciertas condiciones para hacer uso de este crédito y, por lo tanto, los mayoristas y minoristas pueden perder parte de este crédito en el nuevo régimen.
Para evitar este tipo de situaciones, se espera que los mayoristas y los minoristas reduzcan sus existencias durante la fase de transición y vuelvan a abastecerse con el nuevo régimen del IVA.
Impacto posterior a la aplicación
Después de la implementación del GST, estos mayoristas y minoristas no podrán evadir impuestos, ya que toda la cadena de valor será rastreada en línea. Esto también puede dar lugar a un cambio en el modus operandi de las empresas que trabajan con márgenes estrechos. Además, podemos observar un fuerte aumento de la demanda de bienes como resultado de la reposición de existencias por parte de los mayoristas y minoristas.