Qué es una economía cerrada?
Una economía cerrada es aquella que no intercambia sus intercambios con economías externas. La economía cerrada es independiente, lo que significa que no entran importaciones y no salen exportaciones del país. El objetivo de una economía cerrada es proporcionar todo lo que necesitan los consumidores nacionales dentro de las fronteras del país.
Por qué cerrar una economía?
Una economía totalmente abierta corre el riesgo de depender excesivamente de las importaciones. Los productores nacionales también pueden sufrir al no poder competir con los bajos precios internacionales. Por lo tanto, los gobiernos utilizan controles, como aranceles, subsidios y cuotas para apoyar a las empresas nacionales.
A pesar de la singularidad de las economías cerradas, un gobierno puede cerrar una determinada industria a la competencia internacional. Algunos países productores de petróleo tienen un historial de prohibir a las empresas petroleras extranjeras hacer negocios dentro de sus fronteras.
Por qué no hay economías reales?
En la sociedad moderna es imposible sostener una economía cerrada porque las materias primas, como el petróleo, juegan un papel vital como insumos de los productos finales. Es evidente que la mayoría de los países no tienen materias primas y se ven obligados a importarlas.
Las economías cerradas son poco intuitivas para la nueva teoría económica liberal, que fomenta la apertura de los mercados nacionales a los internacionales para aprovechar las ventajas competitivas y el comercio. Las empresas y los individuos pueden aumentar su riqueza especializándose en el trabajo y asignando los recursos a sus operaciones más productivas y eficientes.
La globalización moderna hace que las economías sigan abriéndose para beneficiarse del comercio internacional. Un buen ejemplo de materia prima comercializada internacionalmente es el petróleo.
Ejemplo real de economías cerradas
No hay economías completamente cerradas. Brasil es el país que menos importa del mundo si se mide como parte del producto interior bruto (PIB) y es la economía más cerrada del mundo.
Las empresas brasileñas se enfrentan a retos competitivos, como la apreciación de los tipos de cambio y las políticas comerciales defensivas. En Brasil, sólo las empresas más grandes y productivas, con importantes economías de escala, pueden vencer las barreras a la exportación.