Qué es un despido?
Un despido define el acto de un empresario de despedir temporal o definitivamente a un trabajador por razones distintas al rendimiento real de un empleado. Un despido no es lo mismo que un despido total, que puede ser consecuencia de la ineficacia, la mala conducta o el incumplimiento del deber por parte del personal.
En su sentido original, un despido designaba una interrupción temporal del trabajo, pero con el tiempo el término ha evolucionado para reflejar una pérdida permanente de trabajo.
Un despido le ocurrirá a un trabajador desplazado cuyo puesto de trabajo ha sido eliminado porque un empresario ha cerrado o trasladado su operación. Un trabajador también puede ser sustituido debido a una disminución o interrupción de la producción.
Entender los despidos
Los despidos pueden producirse tanto en el sector público como en el privado, por diversas razones que pueden afectar a una persona o a un grupo de empleados. Normalmente, en un intento de aumentar los intereses de los accionistas, los despidos se llevan a cabo para minimizar los gastos salariales.
Los despidos pueden producirse cuando los profesionales o procesos empresariales estratégicos de una organización cambian, a pesar de la disminución de las ventas, la adopción de la automatización o la deslocalización o externalización.
Efectos de los despidos en la psicología humana
Aunque los empleados se llevan la peor parte de los despidos con la pérdida de salarios y la inestabilidad económica, las consecuencias de los despidos se dejan sentir también en las economías locales y nacionales. También afectan a los empleados que siguen trabajando, a pesar de estos recortes de plantilla.
Por ejemplo, el personal que ha sufrido el despido de sus compañeros experimenta una mayor ansiedad y una mayor preocupación por su propia seguridad laboral. Esto también contribuye a disminuir la moral y la rotación de los trabajadores.
Los empleados que han sido objeto de un despido suelen sentir cierta desconfianza hacia los posibles empleadores, por lo que algunas empresas optan por despedir a muchos empleados a la vez para aliviar el golpe psicológico y asegurarse de que el personal no se sienta señalado.
Los despidos masivos pueden tener un impacto significativo en la economía y la base impositiva de una ciudad o región y pueden causar un efecto dominó en toda una nación a través de las industrias relacionadas.