Introducción
Un honorario de asesor es una cantidad que se paga en concepto de gastos de consultoría por servicios de asesoramiento en asuntos relacionados con los servicios financieros, la gestión del dinero y otros servicios de asesoramiento en materia de inversiones. Los honorarios por el asesoramiento pueden basarse en una tarifa por hora o pueden ser un porcentaje de los activos gestionados, lo que supone un ingreso por comisión.
Comprensión de los honorarios del asesor
Un asesor financiero o un asesor de inversiones puede prestar una amplia gama de servicios. Los servicios para clientes individuales pueden estar relacionados con asuntos de finanzas personales, como la creación de una cartera de inversiones. Para los clientes corporativos o las grandes empresas de inversión, los servicios de asesoramiento pueden incluir la suscripción de la emisión de instrumentos para la obtención de capital.
La función de un asesor de inversiones o de asesoramiento financiero es continua, lo que requiere un seguimiento continuo de las inversiones de la cartera o de los activos gestionados. La cartera de activos puede necesitar un reajuste o remodelación debido a un cambio en las circunstancias económicas o por el cambio en las condiciones financieras del cliente.
El pago de los honorarios del asesor es por gestionar los activos de forma profesional. Un asesor de inversiones o un asesor financiero suele ser una persona con un título en finanzas y con una certificación de un organismo profesional. La función del asesor se rige por las normas y reglamentos del colegio profesional. Por lo tanto, el asesoramiento debe ser después de considerar los hechos del caso y la evaluación técnica.
En el caso de las empresas que desean recaudar fondos mediante una emisión de deuda a largo plazo, nuevas acciones o una emisión de derechos, pueden solicitar el asesoramiento de un experto en finanzas sobre el precio, el tipo de interés y la duración de los instrumentos.
Además, en el caso de una oferta pública inicial por parte de empresas privadas y de ofertas públicas posteriores, la empresa puede solicitar el asesoramiento de un experto en finanzas.
Conclusión
La tecnología ha revolucionado el método de asesoramiento financiero. Los datos financieros cambian constantemente, y un asesor debe estar al día de los últimos acontecimientos de la economía mundial y de las economías locales. El asesoramiento debe ser de naturaleza futurista y debe ser capaz de evaluar los datos de forma técnica y objetiva.