Qué es la agrupación?
El bundling es cuando las empresas empaquetan sus diferentes productos o servicios como un único componente combinado, quizás a un precio inferior al que se cobraría a los clientes por separado para comprar cada artículo.
Esta campaña de marketing promueve la compra fácil de más de un producto y/o servicio de la compañía. Por lo general, los productos y servicios están vinculados, pero también pueden consistir en diferentes artículos que atraen a un grupo de clientes.
Comprensión de la agrupación de empresas
La mayoría de las empresas fabrican y suministran productos o servicios. Determinarán, a un «precio de paquete», si comercializan los productos o servicios individualmente a precios individuales o en paquetes/paquetes de productos.
En muchos sectores verticales, como la banca, los seguros, el software y el automóvil, la agrupación de precios desempeña un papel muy importante. De hecho, algunas organizaciones elaboran estrategias de marketing completas basadas en la agrupación de productos.
Las empresas venden el producto en un esquema de precios por paquete a un precio inferior al que se pagaría por separado por los productos. Los descuentos estimulan la demanda, lo que permite a las empresas vender productos o servicios que, de otro modo, habrían tenido dificultades para descargar, y producir un mayor volumen de ventas.
Tipos de paquetes
Agrupar suele significar dar a los clientes la opción de comprar un conjunto de productos juntos como un paquete a un precio inferior al que pagarían por comprarlos todos por separado, en un proceso conocido como agrupación mixta.
También existe una forma alternativa, más rara, de esta técnica, denominada agrupación pura. La agrupación pura no ofrece a los clientes la posibilidad de comprar los artículos por separado. Un objeto compuesto por varios productos o servicios debe comprarse como una unidad, o no comprarse en absoluto.
Excepciones a la agrupación
Por desgracia, a medida que surgen las necesidades, muchos consumidores, sobre todo los más jóvenes, no aprovechan las ventajas de la agrupación, ya que prefieren comprar varios artículos a la carta. Por ejemplo, los jóvenes que contratan su primera póliza de seguro de coche suelen acudir al agente con el que contactan sus padres y se quedan con esa cobertura durante años.
Más adelante, suelen recurrir a otra aseguradora cercana a su nueva residencia al adquirir sus primeras propiedades. Es un error que cometen la mayoría de los consumidores y que les sale caro.
La realidad es que las compañías de seguros tienen enormes incentivos para ofrecer a cada cliente más de una póliza de seguro, ya que adquirir un nuevo cliente puede costar al menos seis veces más que retener a uno ya existente. Así, las aseguradoras tienen un claro incentivo para vender a sus clientes de seguros de coche una póliza de hogar o de vida, o viceversa.